Son proteínas obtenidas a partir del procesamiento del grano de soya, que de acuerdo a la concentración de proteína y la funcionalidad en la formula, podemos clasificarla en 3 tipos:
1. Aislado de Soya: Es un producto con un nivel de proteína >90%, es altamente funcional, por su capacidad de retención de humedad y poder emulsificante de las grasas, es soluble y por su baja granulometría puede ser utilizada en salmueras de inyección para jamones, chuletas, tocinetas y otros.
2. Concentrado de Soya: es un producto con un nivel de proteína >70%, posee perfil suave de sabor, su uso favorece la retención de humedad y grasas, puede aplicarse en embutidos, jamones, pastas finas, pates, etc…
3. Texturizado de Soya: Es un producto con un nivel de proteína >55%, se presenta en polvo o en hojuelas, su uso favorece la absorción de humedad, otorga viscosidad a la pasta, puede aplicarse en la elaboración de hamburguesas, albóndigas, chorizos, cuando se presenta en forma de hojuela y en la elaboración de pastas finas